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Rafael Hernández
Amanda Naesman de 'På jobbet!' , junto a Rafael Hernández, redactor de la revista Temas. Foto: padittjobb.wordpress.com.
 

16 de diciembre de 2011 | ENTREVISTAS |

Cuba escoge su propio camino

Rafael Hernández es el redactor de la revista Temas, publicada en Cuba por el Ministerio de Cultura de Cuba. Ha sido profesor invitado en la Universidad de Harvard y Columbia en Estados Unidos y también es activo en el Instituto de Relaciones Internacionales de La Habana donde su especialidad es justamente las relaciones con el gran vecino EE.UU.

Cuando Rafael Hernández recientemente visitó Suecia, Proletären tuvo una conversación sobre las relaciones con Estados Unidos y la situación en Cuba, interesante para los amigos de Cuba. Desde hace varios años Proletären ha en varios artículos reflejado el desarrollo de Cuba en un difícil periodo, el último en el número o 31/2011, y como el país busca nuevos caminos para reforzar la revolución económica y políticamente. La imagen que Rafael Hernández da, profundiza el conocimiento sobre la Cuba actual.

Fuente: Proletären. 19-10-2011. Autor: Lars Rothelius. Traducción: Magazín Latino.

Cuéntanos sobre la revista Temas

- Temas aparece con 3000 ejemplares cuatro veces al año y además se puede leer gratuitamente en Internet. La revista toma problemas contemporáneos y busca capturar el amplio debate nacional en Cuba sobre asuntos. Muchos de los problemas que tenemos los compartimos con otros países, sociológicamente, políticamente, científicamente e históricamente.

- En la crisis económica de la década de los 90 surgió un intenso debate crítico particularmente dentro de las instituciones culturales, pero nos faltaban vías para organizar el debate. Entonces se creó Temas como un foro para el debate crítico en Cuba.

¿Quién es el círculo de lectores?

- Está comprendido principalmente por académicos, especialmente maestros, tanto de la escuela básica, de preuniversitarios así como universitarios, pero también de ingenieros, médicos, militares y un gran grupo de personas en la dirección política a todos los niveles. La mayoría de los lectores son cubanos, pero también tenemos subscritores de México y Estados Unidos.

Danos ejemplos de temas que se tratan en Temas

- El significado del socialismo para nosotros, es un planteamiento que está priorizado en nuestra agenda. El marxismo cubano no es homogéneo, más bien heterogéneo, sobre todo porque la sociedad cubana es mucho más diversa que en los años 70. Nuestro debate refleja esta diversidad.

- Así reflejamos y debatimos nosotros en Temas, temas muy diversos, asuntos como el clima y el medio ambiente, problemas de igualdad, asuntos sociales y culturales así como nuestras relaciones caribeñas y por supuesto las relaciones con Estados Unidos.

Sabemos que Raúl Castro trata de minimizar las contradicciones con Estados Unidos. Esas relaciones es uno de tus asuntos. ¿Cómo ves tú esto?

- Vive un millón de cubanos en Estados Unidos y la cultura cubana en el exterior es parte de nuestra cultura. Es por eso que es del interés de ambos países que en estos últimos tiempos se haya visto un mayor intercambio cultural, académico y comercial con Estados Unidos. Así han aumentado los contactos entre las universidades, las iglesias, instituciones culturales y artistas, periodistas. Otra importante área es la del medio ambiente, donde colaboramos con la alerta a los huracanes.

Hablas de un intercambio comercial. ¿Cómo funciona esto con el bloqueo de EE.UU?

- Hemos visto un aumento en la exportación de productos agrícolas de EE.UU a Cuba. A través de un permiso especial, empresas estadounidenses pueden vender sobre todo soya y trigo a Cuba. Además el bloqueo se ha ablandado en lo que se refiere a los vuelos. Ahora van seis vuelos chárter al día de Estados Unidos a Cuba. Cada año 400 000 ciudadanos estadounidenses visitan nuestro país, de los cuales 200 000 son cubano-americanos.

- Al mismo tiempo nuestro intercambio con otros países aumenta. Tenemos más relaciones diplomáticas con el mundo occidental que nunca desde 1959 y hemos establecido relaciones con la República Dominicana, Guatemala y El Salvador. Cuba busca aumentar el comercio con otros países y con la experiencia de la colaboración con la Unión Soviética, ahora no queremos poner todas las relaciones en una sola canasta.

¿Puedes contarnos más sobre el deshielo de las relaciones con EE.UU?

- Hay muchos ejemplos de ello. Los militares cubanos fueron un fuerte contribuidor a la victoria en Angola, lo cual infundió respeto en los militares de EE.UU. Ahora hay un diálogo más civilizado, racional sobre la valla a Guantánamo. Disparos y muertes allí pertenecen al pasado. Constatamos también que por el momento EE.UU ha dejado congelados eventuales planes de invasión.

- Los militares también colaboran contra el contrabando de drogas y hemos progresado en lo que se refiere a asuntos migratorios, donde ahora Estados Unidos devuelve a los botes cubanos capturados en aguas internacionales.

 

Según Rafael Hernández, en los últimos años ha ocurrido un mejoramiento en el diálogo entre La Habana y Washington, el resultado es limitado pero de todas formas notable. Existe un continuo intercambio sobre migración, correo postal directo y sin eliminar las restricciones que George W Bush impuso en el 2005, Estados Unidos ha vuelto a otorgar visas a los académicos y artistas. En el congreso se ha tomado la iniciativa con el propósito de restablecer el derecho a viajar a Cuba.

 

Actualmente se realizan grandes cambios en Cuba. ¿Los ves como necesarios?

- Tu pregunta es muy amplia. Así que permíteme primero darte antecedentes. En la década de 1980 teníamos una diferencia en los salarios de la orden de 400 a 100 y uno se las arreglaba decentemente con el más bajo. Pero cuando la Unión Soviética cayó, y por ende la economía cubana, el PNB bajó en un 45 por ciento y los salarios en un 60 por ciento. NO teníamos electricidad ni trasporte. Cuando el salario no alcanza para satisfacer las necesidades del pueblo, el salario ya no fue el ingreso principal.

 

Antes de 1990 no se necesitaba dinero de afuera para vivir bien en Cuba. Pero luego del colapso económico los ingresos de los parientes en el extranjero fueron decisivos para muchos, muchos cubanos. Otra forma de sobrevivir era tener varios trabajos. Rafael Hernández cuenta que él mismo aumentó sus ingresos tomando trabajos extras como traductor y dando clases en la universidad.

El mercado ilegal que había, aumentó 20 veces en corto tiempo. Lo que forzó en 1993 a cambiar las regulaciones que permitía ciertas formas de negocios propios, principalmente en la agricultura y los taxis, pero también en pequeños restaurantes, enseñanza privada, y alquiler de habitaciones.


- Esto fue la salvación de muchos cuando la comida subvencionada que se podía comprar con la libreta no alcanzaba. Todos estaban obligados a comprar en el mercado libre con pesos o dólares.

- Pero al mismo tiempo los cambios condujeron a un incremento de las injusticias cuando las diferencias en los salarios se ampliaron a la proporción de 100-200. El salario no alcanzaba para satisfacer las necesidades del pueblo.

 

Para muchos cubanos sin contactos fue una situación muy crítica. Especialmente afectados eran los ciudadanos negros. Rafael Hernández cuenta que la mayoría predominante de los cubanos que abandonaron el país en los años 60 eran blancos y en la crisis estos contribuyeron con divisa fuerte a sus parientes que se habían quedado. El aumento de las diferencias sociales es una importante explicación de los cambios en el sistema de subsidios que ahora se introducen.

- En vez de tener subvenciones generales ahora están dirigidos a los que más lo necesitan. ¿Por qué un estado socialista debe subvencionar los cigarrillos y el ron? se pregunta Rafael Hernández y da seguidamente la respuesta.

- No esos derechos generales son una enfermedad. Sin embargo el Estado debe marcar claramente que la educación y el bienestar social son un derecho universal.

Cuéntanos más sobre los cambios económicos que ahora cobran impulso

- Entre las directivas económicas que se aprobaron en el VI Congreso del Partido, está que toda explotación de toda la producción agrícola será asumida por campesinos individuales o cooperativas. Hoy el Estado es propietario del 85 por ciento del terreno mientras el 15 está en manos privadas.

- No hay excusas porque en nuestro país no hayamos logrado producir el trigo y el arroz que los habitantes del país consumen. La verdad desnuda es que la propiedad estatal no ha funcionado en 50 años. Nuestra meta debe ser que Cuba se auto abastezca de sus alimentos básicos.

¿No ves esta privatización como un riesgo para la sociedad socialista?

- Sí, hay riesgos, pero en el fondo no se trata de privatización ya que el estado alquila su terreno con contratos de arriendo de 20 años. Una ventaja decisiva es que nos evitamos un montón de burocracia.

Pero claro que las autoridades ven que acechan los peligros del capitalismo naciente a la vuelta de la esquina y Rafael Hernández cuenta que los campesinos individuales pertenecen a una asociación que ahora exigen la propiedad del terreno.

- Hay un intenso debate sobre esto. Por supuesto que nosotros utilizaremos la ley como instrumento donde los derechos y obligaciones de cada agricultor están claramente estipulados. También existirán limitaciones de cuanto terreno puede utilizar una persona.

- Puedes estar convencido que las áreas de la salud y atención médica y la escuela, donde estamos a la vanguardia pero que de todas formas debemos ser más efectivos y ahorrativos, no se privatizará. Sobre esto no hay ninguna discusión.

- Pero la venta de un perro caliente y papitas fritas y cosas similares, ahí la propiedad estatal era una mala solución. Solo conduce a burocracia.

Rafael Hernández desdramatiza los cambios económicos que se realizan en Cuba. No se trata en absoluto de un cambio de sistema. El pueblo de Cuba sabe lo que significa el capitalismo y hace cuidadoso hincapié durante toda su existencia la Cuba socialista siempre ha escogido su propio camino.

- No seguimos servilmente a la Unión Soviética, ni tampoco a China. Antes de 1968 había pequeñas empresas privadas. Luego se decidió nacionalizarlas. Lo que no funcionó. Con el tiempo la burocracia se amplió patológicamente.

- La liberalización económica que ocurre ahora parte de nuestra propia historia y de nuestras propias necesidades. Para que funcione el socialismo tiene que tener el apoyo del pueblo. Lo que el Che expresó en estas palabras: Un líder es quien logra interpretar las necesidades y deseos del pueblo.

Con montones de pequeñas empresas privadas, ¿qué ocurrirá con ellas el día que Estados Unidos se vea obligado a levantar el bloqueo económico? El capital estadounidense podría comprar todo.

- Por qué hablar solo de pequeñas empresas. En Cuba la mayoría es dueño de su propia vivienda. En Estados Unidos existen 1,8 millones de cubano-americanos, de los cuales 800 000 nacieron en Cuba. Aquí hay descendientes de la antigua clase reinante y está seguro que quieren y pueden comprar en la práctica todos los bienes inmuebles en Cuba.

- De esto están muy conscientes Raúl Castro y el resto del gobierno que pertenecen a la generación que venció al capitalismo. Son la misma generación que introdujeron las actuales reformas y es seguro que crearán las reglas que impidan que la vieja clase capitalista recobre sus privilegios.

 

 

 

 
 
 
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