Por: Juan Alemany
Este domingo 13 de febrero el ejército ha anunciado la suspensión de la Constitución y la
disolución del Parlamento, que estaba en manos del Partido Nacional.
El ejército anunció que la constitución fue suspendida con el fin de corregir la nueva situación que vive Egipto. Los militares declararon que están conformando una comisión en este sentido, ellos han jurado devolver el poder a los civiles, como salida al proceso transparente y democrático, dan por primera vez un calendario detallado de cómo devolverán el poder a los civiles.
De la misma forma en el comunicado militar, estos informan que todos los convenios internacionales firmados por Egipto serán ampliamente respetados.
La reforma a la constitución debe realizarse ya que en las elecciones del 2010 el fraude
había sido muy grande, y en la misma constitución anterior, se le daba al presidente de la república poderes y mandatos ilimitados, que son una causa implícita de la revuelta.
El domingo hubo grandes manifestaciones en la plaza Tahrir en el Cairo, encabezadas por uno de los nuevos líderes populares Wael Ghonim, en esa oportunidad se le comunicó al ejército que se iba a vigilar que cumpliera su palabra.

Wael es un joven de profesión experto en informática, que ha encabezado un poco la revuelta y los cambios exigidos por el pueblo y que finalmente sde ha convertido en un héroe nacional.
Sobre este tema, cabe remarcar lo importante que ha sido, dentro de este contexto, la función de Internet, como el eje más grande actualmente de manejo de información.
La gente sufrió un golpe enormemente duro, en el momento que el ex presidente decidiera cancelar o interrumpir el uso de Internet en Egipto.
Es para reflexionar, que a nivel popular, en la actualidad la gente puede tener más información que antes, y mediante una forma ciberespacial obtener información acerca de la realidad.
Anteriormente, la realidad estaba definida por lo que decían los dictadores de turno, en el país que fuere, hoy en día, Internet se ha convertido en una herramienta liberadora para poder adquirir conocimiento acerca de las democracias que existen en el mundo y el pueblo puede reaccionar exigiendo cambios.
Si bien aún no se sabe cómo actuarán los movimientos fundamentalistas que operan en Egipto, sería el único riesgo negativo que estos cogieran el poder, aunque parece lo menos probable, ya que el ala democrática dentro del ejército sería la dominante.