31 de diciembre de 2011 | EDITORIAL | (Ojo! aprete el ícono 
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¡Adiós 2011 – bienvenido 2012!
Como al final de cada año, hacemos un recuento de estos 365 días recién pasados. Quisiéramos poder decir que ha sido un buen año, pero estaríamos mintiendo. Sobre todo quienes vivimos en la parte norte del planeta, donde las catástrofes naturales son más escasas que en otras latitudes y donde las bajas temperaturas se compensan con un buen estándar de vida. Este año nos asestaron un golpe donde más nos duele: nuestros jóvenes.
Una sola palabra representa el año noticioso 2011: Utøya, la pequeña isla con forma de corazón ubicada a pocos kilómetros de Oslo. La isla donde un desquiciado cegó la vida de más de 60 personas, dejando a toda Noruega en estado de choque. Otras siete personas perderían la vida en el atentado que el terrorista dirigiera en contra de la casa de gobierno noruega. Nuestro tranquilo y próspero país vecino no recibía un golpe tan terrible desde los aciagos tiempos de la segunda guerra mundial. Porque duele mucho el ver que se apaga la vida de quienes tienen el futuro por delante: los jóvenes.
Y hoy en día el terrorista noruego se encuentra en una prisión de alta seguridad, vigilado las 24 horas del día. Pero, por más vigilancia policial que se tenga, su mente permanece hermética, no da muestra alguna de arrepentimiento o compasión. En el examen siquiátrico que fuera sometido los médicos constataron que no estaba en su sano juicio cuando cometió los dos atentados. ¿Alguien se asombra? Sin embargo, el diagnostico de los facultativos causa impotencia en muchos, ya que esto significa que no va a poder ser condenado a la cárcel, sino al siquiátrico, desde donde tal vez algún día lo den de alta. Obviamente un pensamiento que preocupa.
Pero, si bien es cierto que fue el "terrorista rubio" quien sostuvo el arma, fue la obscura ideología de la extrema derecha quien oprimió el gatillo. Y debería también ser enjuiciada. No obstante y como es su tónica, la extrema derecha muestra otra cara y declara estar en contra de todo lo que el asesino en masas representa. Es de esperar que el periodismo investigativo deje al descubierto la verdadera cara de estos grupos que se esconden bajo una sed de democracia pero que tienen una agenda oculta.
En otro lado del planeta, la juventud chilena ha luchado incansablemente, liderada por una joven ejemplar: Camila Vallejo, coreada por los cibernautas de la revista The Guardian como la personalidad del año. Los jóvenes estudiantes han luchado sin claudicar, dando muestras de una creatividad enorme, sin violencia, por el derecho a una buena educación, gratuita, que no es lo mismo que lo que el gobierno de derecha quiere ofrecer: limosnas, llamándolas "becas de estudio". Y, mientras los jóvenes se han volcado a la calle exigiendo lo que les corresponde, el gobierno chileno ha dado muestras de una represión digna de los tiempos de la dictadura. Y las fotos de los carabineros golpeando a niños y jóvenes han recorrido el mundo.
El 11 de marzo un terremoto grado 9, en la escala de Richter azotó el Japón. El más grande de la historia, ocasionando un tsunami con olas de 40 metros de altura que azotaron las costas de 10 kilómetros en tierra. Alrededor de 15 000 muertos, 200 000 personas evacuadas y 45 700 edificios destruidos en un cataclismo correspondiente a la energía de 600 millones de bombas de Hiroshima. Como si esto no fuera poco, uno tras otro los reactores nucleares comenzaron a colapsar en la pequeña ciudad de 300 000 habitantes, Fukushima, al norte de Tokio. Y la radioactividad a dispersarse y las imágenes que nos llegaban del país nipón eran cada vez mas alarmantes, con una radiación mil veces mas alta que lo normal, según lo informó la agencia japonesa Kyodo.
Alemania decidió, a causa del accidente de los reactores de Fukushima frenar su programa nuclear, mientras que Finlandia prefirió aumentar el suyo y Suecia resuelve no adoptar respuestas precipitadas. Las consecuencias de esta tragedia aun están por verse, a principios de diciembre las autoridades sanitarias confiscaron 400 mil litros de leche infantil luego de detectarse altas dosis de radioactividad en esta y según un informe francés, la contaminación radioactiva marítima producto del desastre nuclear es la más grande de la historia.
En Suecia la familia real, y el rey Carl Gustaf en particular no tuvieron el mejor de sus años. A fines de mayo, el rey dijo: "Ahora damos vuelta a la página", a propósito de los picantes detalles revelados en el libro "Monarca a su pesar" (traducción libre). Se dio vuelta la página, pero le siguieron otras, y otras, transformándose esto en un culebrón real mediático sin precedentes en la historia de Suecia. El rey no ha confirmado ni ha negado las visitas a los clubes nocturnos alternos en sus tiempos de juventud, las fiestas con chicas ligeras de ropas y la supuesta amante. Tampoco se querelló, la corte, en contra de los autores del libro, lo cual hace suponer que no tiene pruebas de demostrar que el libro miente. Y, para colmo, su amigo de toda una vida se contactó con uno de los mafiosos para comprar su silencio. El mafioso asegura que pronto publicará fotografías comprometedoras del monarca, pero esto lo viene repitiendo desde hace ya bastante tiempo y en una de las fotografías que al fin salió a la luz se demostró que había sido manipulada.
Por esto mismo, la noticia que se divulgó rápidamente en todos los medios nacionales el 17 de agosto fue un verdadero alivio para la corte: la Princesa Victoria estaba encinta. Con ello se aseguraba la sucesión del trono. Luego de más de un año de haber contraído nupcias y de que la prensa amarilla la diera por embarazada apenas se mostraba en público, la princesa y su príncipe por fin pudieron dar a conocer la importante noticia. Alegrando a la mayoría de los habitantes del reino: la princesa Victoria, a diferencia de su padre, quien ha disminuido en popularidad, es sumamente querida en Suecia, por su sencillez, su simpatía y el hecho de que haya luchado durante siete años, por su príncipe azul, Daniel.
Para marzo está anunciada la llegada del nuevo miembro de la familia Bernadotte, descendiente directa del mariscal de Napoleón Jean Baptiste Jules Bernadotte, coronado en 1818 como Carlos XIV de Suecia. ¿Un futuro rey o una futura reina? La cigüeña es la misma, para reyes y plebeyos.
Durante todo el año nos han llegado las noticias desde el norte de África, en lo que se denominó "la primavera árabe", que comenzó con la desesperación de un joven tunecino, Mohamed Bouazizi, quien se inmoló, después de tantos atropellos cometidos por la policía de su país en contra del pueblo. Al prenderse fuego a si mismo, prendió también la llama de la revolución en el mundo árabe, donde los gobiernos uno a uno han ido cayendo, como piezas de dominó.
Impactantes fueron las imágenes de la captura y el linchamiento de Muamar Gadafi, que se encontró cara a cara con todo el odio de quienes iba a "exterminar como ratas" y "hacer huir como perros". Humillante retirada para quien se apodó "El león del desierto". Y un gran error de parte de las fuerzas rebeldes, que carecieron de la capacidad suficiente para hacer respetar las leyes marciales. Por muy cruel que haya sido un tirano, merece ser juzgado como corresponde.
Ahora, al finalizar el año, Siria se encuentra al borde de la guerra civil y en Egipto el mando aun está en manos de los militares. Los atropellos, sobre todo en contra de las mujeres, han continuado. Las mujeres han sido importantes protagonistas de esta primavera árabe, pero, como más de alguna líder lo ha dicho: "Luego de hacer la revolución externa, tenemos que hacer la revolución interna", refiriéndose a la igualdad de género.
Por lo tanto fue gratificante que tres mujeres recibieran este año el Premio Nobel de la Paz, con ello el Comité del Nobel de la Paz - que no queda en Suecia sino en Noruega - demostró que le interesa la lucha tanto del pueblo africano, como de las féminas del planeta.
Y a propósito del Nobel, gran euforia causó el Premio Nobel de Literatura este año, que recayó en el candidato eterno, Tomas Tranströmer, poeta muy querido en Suecia y conocido internacionalmente. Y, algo que no ocurre a menudo, todos conocían, o habían visto algo, por lo menos del laureado, el poeta que a raíz de un derrame se quedó sin voz, pero que habla mediante el amor: su esposa Monika.
Siguiendo en el ámbito nacional y, como alguien dijo: "Nada es tan malo que no se pueda transformar en una catástrofe". El repunte de la Socialdemocracia y la esperanza de recuperar su tiempo de gloria y majestad con el nuevo líder bigotudo: Håkan Juholt, se vino abajo, luego de múltiples impases del sucesor de Mona Sahlin, que cambió de opinión demasiadas veces en demasiados temas para lograr afiatarse en el difícil cargo. Y que posteriormente cayó directo al ojo del ciclón, con una de las caerías mediáticas mas feroces de los últimos tiempos, dando – al fin y al cabo – muestras de un aguante increíble, pero del que muchos dudan si logrará conseguir que se mantenga en su puesto. Magazín Latino cubrió todos los pormenores y más de algún lector se molestó de que lo llamáramos: el culebrón Juholt.
Otra de nuestras coberturas más acuciosas de este año fue la de los periodistas suecos acusados de terrorismo en Addis Abeba. Magazín Latino es uno de los pocos medios que ha cubierto la noticia en español, y que comenzó incluso antes de que los grandes medios y los diarios de la tarde lo hicieran. La historia de Martin Schibbye y Johan Persson, los jóvenes reporteros que viajaron a la región de Ogaden, en la frontera de Somalia y Etiopia, para investigar las graves violaciones a los derechos humanos y de que manera la empresa Africa Oil (antes Lundin Oil) está implicada en el asunto. Con tal mala suerte que fueron descubiertos por el régimen totalitario etíope, apresados y condenados a 11 años de cárcel. Johan y Martin iban a investigar los negocios de la petrolífera en el cuerno de África, y el hombre que los puede salvar de la prisión etíope es justamente la persona ligada a la empresa: el ministro de exteriores sueco, Carl Bildt. Quien se fue de vacaciones, al caer el fallo.
El flujo noticioso no decae nunca, y esta editorial podría alargarse con muchos otros sucesos ocurridos en este año que está a punto de pasar a la historia. Sin embargo, ponemos punto final, deseando tal vez que el 2012 nos traiga más sabiduría, más compasión, más amor y menos odio. Más generosidad y menos avaricia, porque, al fin y al cabo, estas fuerzas son las que mueven el planeta.
La última frase la escribo pensando en los cambios climáticos ocasionados seguramente por la avaricia de las grandes empresas transnacionales y constatando que en pleno diciembre, en Estocolmo, Suecia, no tenemos nada de nieve, las aves migratorias no quieren emprender su vuelo y flores típicas de primavera ya han hecho su aparición.
Tenemos un solo planeta, ¡cuidémoslo!
Marisol Aliaga
Editora responsable
E-mail: magazinlatino@gmail.com
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