22 de diciembre 2013 | COLUMNA |
Un alegato sobre el año 1914 y el 2014
y saludos
Por: Víctor Aquiles Jiménez H.
Queridos amigos lectores de Magazín Latino, en estas fechas de fiestas navideñas y de fin de año a todos nos invade un espíritu solidario y de paz sintiéndonos un poco más buenos que el resto del año en donde nos sentimos en cierto modo presos autómatas por nuestras luchas, metas anhelos, compromisos y competencias.
En mi caso de pronto yo me he sentido liberado de todo eso y me he tomado un recreo y no he hecho nada, solo las cosas domésticas de mi hogar, atender a mis hijos cuando pasan por acá, sacar al perro y vivir un poco ajeno a lo que acontece a mis espaldas, alrededor o más allá de mi horizonte, sabiendo que todo sigue tan convulsionado o más que antes, o tal vez no tanto. Es que me ha llegado una especie de distimia intelectual, algo así como una indiferencia, porque durante muchos años he vivido demasiado preocupado, tanto como escritor -que es a lo más que le he dedicado tiempo- y al estudio y a escribir ensayos diversos sobre la interrelación humana, sus posible proyecciones, sean auspiciosas o las mismas que pueden darse con leves variaciones sin que notemos cambios novedosos.
Escribo esto porque tanto desde la observación literaria, como sociológica, he estado haciendo aportes con mis cuentos, poesía, ensayos sobre los tópicos de más actualidad sin dejar nada al azar y muchas de esas observaciones las he traspasado a mis obras y algunas ya resultan proféticas por haberlas escrito cuando aún no surgían de tales o cuales situaciones.
Por ejemplo en mi libro Megalaxia Ciudad Infinita (Don Cometa el profeta de los niños, Editorial Universitaria, 1981primera edición, 1985, segunda edición) entre el largo tema de ficción en un capítulo se hablaba de la contaminación que sufriría la Tierra con la chatarra espacial que sería una amenaza a considerar alguna vez, y hoy ya es una amenaza latente, y en mi otro libro Cuentos ecológicos, Yalde, España, 1994, muchos de los temas de los cuentos de ficción, hoy son una realidad, si hablamos de desechos radiactivos exponiendo a la población que busca en los basurales desperdicios para vender...y así, como también la venta y robo de órganos humanos para comercializar con ellos.
Sobre la ciencia y sus límites he escrito ensayos que se encuentran en revistas especializas sobre determinados temas insolubles todavía como es la manipulación genética, en este caso el genoma humano. Escribí un ensayo con el título CONCIENCIA DEL LÍMITE, que ha merecido un reconocimiento académico que me alegra, pero que como pensador me sigue preocupando a raíz de que la ciencia avanza demasiado rápido hoy en día y todavía no hay límites establecidos a lo que debe ser hasta donde se puede avanzar y detenerse. Y de mucho más he escrito, de corrupción política, de la explotación humana, de la prostitución, del abuso de poder, de las guerras, de la paz, de la educación, de un mundo mejor y no me he callado nada, y el racismo lo he tratado desde la sociología y otras asignaturas para ver si hay un valor que lo justifique, es decir que justifique el racismo.
He escrito sobre el origen y causas de las guerras de si la violencia es parte de la biología neuronal del cerebro humano, de si está en alguna parte de sus hemisferios, de si es genética, de si hay pueblos más violentos que otros, seres humanos más violentos que otros o de si es aprendida, también he sacado mis conclusiones y una, es de que no, el ser humano, el hombre no es agresivo por naturaleza, sino que por cultura, nos transmitimos la violencia y los ambientes que la desencadenan, así de sencillo, en caso de que haya criminales aislados, como individuos, cae eso en la categoría de la criminología, y son competencia de la psicología, psiquiatría para su tratamiento, de la policía y de las leyes para su prevención y contención y se pueden clasificar como conductas desviadas o patologías mentales desde la sociología.
Pero lo que me interesa a mí es saber si la violencia generalizada se debe a algún factor cerebral que se activa en determinadas situaciones, haciéndonos tener instintos criminales de exterminio suicida, y hasta el momento a través de la neurociencia no se ha encontrado ese "neurotransmisor colectivo asesino" es más, la violencia es aprendida desde la más tierna infancia, por lo tanto las conductas desviadas masificadas pueden ser modeladas o moldeadas desde otros parámetros para construir un mundo y sociedad más justas, equilibradas y de paz y ese es un trabajo que hay que realizar y de manera aislada, sino que construyendo normas a través de la educación a crear solidaridad, empatía y equilibrio en la repartición de los bienes para acabar con las miseria y pobreza. No digo que esto sea fácil y un discurso guardado en el armario para grandes ocasiones, sino un deber y una preocupación constante que nos lleve a trabajar por estas pautas, tenemos a favor la Naturaleza que no aconseja que la violencia ni la agresividad criminal sea buena para la preservación de la vida humana, de su entorno, incluyendo a los animales y medioambiente.
Como ya he dicho llevo mucho tiempo en esto y para cerrar el año había escrito más allá de la mitad un acucioso trabajo sobre los 100 años que se cumplirán de la Primera Guerra mundial, iniciada en 1914, no es una hazaña la que recordar, cono la estupidez más grande realizada por los hombres, en este caso de Europa en la que murieron en 4 años más de 7 millones de soldados, que como moscas caían ante la eficacia de nuevas armas, atroces para entonces y para hoy todavía. Una guerra que no necesitó más que el pretexto del vil asesinato de un hombre, desconocido para el mundo, Fernando de Austria.
Desde 1914 al 1918, más hubo más de 10 millones de muertos y 6 millones de discapacitados, de entre los más de 60 millones de soldados europeos movilizados, de los que morían, más de 6.046 todos los días. En 4 años el mundo vivió esa locura colectiva que enfrentó a las grandes potencias imperialistas del mundo, incluyendo a sus colonias que la hicieron mundial.
El detonante fue el asesinato del archiduque Francisco Fernardo de Austria, heredero del trono del Imperio austro-húngaro, el 28 de junio de 1914, en Sarajevo por el nacionalista serbiobosnio Gavrilo Princip.
La historia de esta gran y primera guerra mundial está ampliamente relatada en los libros, por la significancia que tuvo a escala planetaria y también en Internet, para mayor información se puede consultar de las fuentes precisas y concisas en la fuente de Wikipedia 1que citaré al final de esta columna. A las pocas semanas después del magnicidio, las potencias del mundo estaban en guerra y a través de sus colonias el conflicto se extendió por el mundo.
Estamos a pocos días de entrar al año 2014 en el que se cumplirán 100 años de la catastrófica debacle mundial que apenas desde su final pasaron dos décadas para que se iniciara en 1939 la Segunda Mundial con los mismos actores de la primera y un saldo de más de 70 millones de víctimas mortales, sin considerarse a los mutilados y enfermos traumatizados, lo que haría subir la cantidad de víctimas, en donde se "entrenaron" nuevas armas de destrucción masivas que son las que producen las bajas porque cada vez las armas son más sofisticadas y letales, como sucedió ya en la primera guerra mundial, que exponía a los soldados de la infantería, soldados de tierra y caballería para la lucha concencional como se conocía entonces del cuerpo a cuerpo, siendo barridos por las armas automática de repetición.
También se conoció el "Holocausto" ideado por la Alemania Nazi para exterminar a grupos humanos como fue en contra de los judíos con un saldo de más de 6 millones, casi todos las víctimas de la primera guerra de 1914, que según la filosofía nazi consideraba pueblos "impuros no arios", entre ellos muchas etnias, como la de los gitanos. Los alemanes nazis propusieron a su ideario el modelo ideal de hombre puro al germánico-nórdico.
Esto fue el nuevo "aporte" a las guerras por los alemanes en Europa en la segunda guerra mundial que hizo tanto o más estragos que las armas mismas porque se unió a las armas el fanatismo racial como filosofía y política.
Algunas de las causas que propiciaron la primera guerra, aparte del suceso que la detonó con el asesinato del archiduque Fernando estaban relacionadas con la disputa mundial del predominio tecnológico, financiero, industrial y comercial que a finales del siglo XIX tenía el Reino Unido y Alemania y Estados Unidos le disputaban ese predominio.
Dentro de lo que era el complejo mapa geopolítico-industrial y comercial tanto en el siglo XIX, de las grandes potencias coloniales europeas, Estados Unidos y los nacionalismos que se incubaban, eran caldo de cultivo para producir un ambiente beligerante que podría estallar de forma violenta como fue en la primera guerra y un par de décadas después con grandes variantes los mismos protagonistas participan en la segunda guerra mundial.
En esta columna no quiero referirme por la imposibilidad de hacer un resumen de las causas, ya que están muy bien documentadas en cientos de libros, como documentales, películas, artículos de prensa y en Internet, que me llevan mejor a tratar mis puntos de vistas que ha comenzado por hablar del año 1914, que dio origen a la primera guerra mundial al acercarse el aniversario número 100.
Resulta horroroso que en un mismo siglo hayan ocurrido dos guerras mundiales, y casi ocurre una tercera, es paradojal, no quiero decir que antes no haya habido guerras, sino que no tenían el rango de guerras mundiales porque eran continentales, Europa, Asia, África, tribales y locales donde se vieran representadas todas las potencias, sus colonias y países que se vieron envueltos y tomaron posición, a favor de un bando u otro, dependiendo sus intereses y porque las posibilidades de declararse neutrales era un asunto complejo y delicado. Decía en mi trabajo que se me borró que Suecia se mantuvo "neutral" mientras que por debajo mantenía una extraña relación con los alemanes, que de paso recibían su acero y tenían en su mira atacar a Suecia con aviones e infantería si algo no "funcionaria", me referí a que Chile también se unió a los Aliados casi al final de la guerra declarando la guerra al Eje.
Estados unidos envió potentes cañones a Chile para desplazarlos por sus principales puertos, entre ellos San Antonio, mi ciudad natal, donde en el fuerte Panul, se instalaron esos cañones a cargo de un contingente de la Armada chilena, llamado artilleros o la Artillería. Yo siendo niño conocí esos cañones cuando nos llevaban desde la escuela ya en tiempos de paz a conocerlos. Chile estaba en el Pacifico y en la Primera Gran Guerra del año 1914 hubo un combate entre las flotas alemanas e inglesas, ganando los alemanes, para luego los ingleses asestaran un golpe a los alemanes. Esta batalla naval fue en la bahía de Coronel, Chile y se le conoce como Batalla del día de Todos los Santos. Me esmeré en dar una descripción detallada obtenida de libros, apuntes e Internet de esa batalla, como forma de graficar que en los conflictos nadie queda afuera y menos hoy en día si se iniciara una nueva guerra mundial.
También escribí que motivos para desencadenar un par de nuevas guerras mundiales han sobrado, pero hemos aprendido la lección y hemos tenido conflictos locales, como la guerra del Viet Nam, en que las grandes potencias como Estados Unidos y la Unión Soviética, participaron en bandos diferentes, también pudo estallar otra guerra cuando se dio la crisis en los años 60 con el envío a Cuba por parte de la Unión Soviética y Estados Unidos protesto y se movió para impedirlo, hubo entonces otra ocasión de que estallara una nueva guerra mundial y por fortuna no ocurrió, y otra oportunidad pudo haber ocurrido con el asesinato del Presidente Kennedy en noviembre del año 1963 en Dallas, acontecimiento celebrado en todo el mundo en noviembre recién pasado con grandes homenajes al más querido presidente norteamericano. Recuerdo bien la el año y lo peligroso que fue para todo el mundo, porque yo hacía mi servicio militar sin cumplir los 20 años, y fuimos acuartelados con armamento para actuar contra un enemigo fantasma.
Estaba escribiendo esa columna larga con la intención de recordar el inicio de esa guerra el año 1914, del que cumpliremos 100 años, preocupado de que nunca más se vuelva a dar otro conflicto de esa magnitud, dado el poderío destructivo que tenemos hoy que por mucha imaginación que tengamos no podemos hacer un panorama de lo terrible que sería. Por eso celebro los acuerdos de las naciones en cuanto a desarme de armas químicas en Siria, que de no haber sido así estaba encendiendo los ánimos de las potencia, suerte que imperó el criterio y se acordó un acuerdo de desarme y de paz. Y así ha de ser desde ya, buscar consensos para evitar conflictos de los que no tengamos que lamentarnos y arrepentirnos, si es que quedamos vivos luego.
El año 1914, algunas sectas religiosas lo tienen como una fecha endemoniada, y la historia lo cataloga como una fecha desgraciada como hemos visto, pero el año 2014 no tiene por qué compararse a 1914 de hace 100 años, porque así como tenemos grandes arsenales atómicos destructivos capaces de destruir el planeta más de 10 veces, bastándonos con una, tenemos una tecnología que nos permite estar mejor intercomunicados como jamás lo hemos estado en el curso de nuestra historia y eso nos da el poder de decidir y protestar y salir a la calle en cosas de minutos y presionar a los gobiernos y con ello evitar conflictos de cualquier naturaleza que atente contra los derechos humanos. Eso es posible y una herramienta social alcance de todos y eso nos da injerencia en todo.
Y gente que trabaja por la paz y que se oponen a las guerras de destrucción masiva entregan información de cómo se llevan y cometen los crímenes más repudiables como es el caso de Wilileaks o del espionaje norteamericano a Internet y teléfonos, asunto que hoy se trata en la Unión Europea y Estados Unidos.
A decir verdad, había escrito una larga columna para cerrar mi año con algo interesante en Magazín Latino, hoy he citado de memoria lo que he podido rescatar, pero sigo con la preocupación moral, como escritor y profesional, como ciudadano amante de la paz que la paz en un gran ansia insatisfecha, que debemos trabajar por ella y que no debemos temerle al futuro, sino desearlo para en él apartar desde ya un granito de arena o una semilla para que germine con las ilusiones que tenemos hoy de una sociedad mejor, y nuestra gran arma son nuestros corazones y mentes y debemos mirar con optimismo el futuro y hacer planes constructivos, pensar en positivo de que es posible edificar una sociedad, un mundo mejor, aunque parezca un discurso de mesa y de gala, hay que pensar así.
El racismo que asola de nuevo a Europa, debemos pensar si nosotros con nuestros temores hemos despertado a los fantasmas, entonces pensemos lo contrario, no creamos en las diferencias que nos separan como pueblos, como culturas y razas, sino que veamos lo que nos une, y en principio somos todos humanos y todos deseamos lo mismo, ser felices en la Tierra, nadie quiere, ni desea sufrir miserias ni esclavitudes, a menos que tengan alguna patología, pero es la única forma de vencer a los fantasmas en encendiendo las luces y no creer en ellos, no podemos temer a las ideas abstractas que quieren crear diferencias donde no las hay. Y si hay un Dios universal, es un Dios para todo y como lo retratan los libros sagrados, es un Espíritu Santo, Benigno, Bueno, que no puede permitir derramamientos de sangre en su nombre, ni crímenes, porque va contra su Esencia Divina.
Hasta aquí llego hoy mis queridos amigos y lectores con esta columna a medias, solo decirle que todos tenemos algo que recordar del año 1914 como un acontecimiento feliz también, yo tengo el mío propio, el nacimiento de mi padre Víctor Jiménez, Q.E.P.D. Nacido precisamente ese año y el de un amigo como Nicanor Parra, anti poeta, no sé, si es que existe la anti poesía, pero un gran escritor, intelectual y Premio Cervantes de Literatura. Motivos de más para celebrar el advenimiento del año 2014 en que espero cumplir otra importante fecha en mi vida también.
Les deseo a todos los lectores de Magazín Latino y a su directora Marisol Aliaga unas felices fiestas Pascuas y de Año Nuevo, de todo corazón, comprometiéndome con nuevos trabajos apenas se acaben las celebraciones y yo en lo personal seguir aportando obras al mundo.
Un abrazo a todos mis lectores, amigos, colegas y familiares.
¡FELIZ NAVIDAD Y UN PRÓSPERO AÑO 2014 PARA TODOS!
1) http://es.wikipedia.org/wiki/Primera_Guerra_Mundial
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