Logotipo

Portada Suecia América Latina Mundo Multimedia
 
 
El Estado no decide aquí

El tema del aborto se viene debatiendo en Chile desde hace años. Foto: eldinamo.cl.

 

23 de septiembre de 2015 | COLUMNA |

La dignidad de una mujer

 

Por: René Barraza Pizarro

 

"La dignidad de una mujer no se pierde por el hecho de ser violada". Esta es una de las frases aciagas de la semana, dictada por una congresista de derecha Marisol Turres, en la comisión de salud para votar por el proyecto de ley para despenalizar el aborto en Chile.

Hay especímenes en este país que distan demasiado de su propio género, de su pueblo y de la sensatez humana.

Una diputada justamente de esa especie tan particular y disociada como el partido político que representa (la UDI), quien en la misma oportunidad señaló lo siguiente: "Hay violaciones que no son violentas" 

¿Será el resabio natural de una hija de torturador, que como justificación ante una imputación, le explicó que cuando violó a la detenida no lo hizo bajo tortura o violencia?

"La dignidad de una mujer no se pierde por el hecho de ser violada" - Diputada, ¡una violación no es dignificante! - El acto es indigno, no sólo para la mujer ultrajada, sino también para sus familiares cercanos. No me imagino cómo quedará una madre, un padre, hermanas, hermanos, hijos, con esa situación. Menos me imagino el dolor de la violada. Por lo tanto, no pensaría en obligarla en defender la fecundación de un espermio del asqueroso y cobarde violador (me la imagino recordando el vil momento, las desagradables babas, la lascivia animal y patética). No, no podría obligarla a mantener ese embarazo.

Que lamentables estos pensamientos tan alejados de nuestro Chile. Definitivamente, se necesitan personas que entiendan mejor la evolución de nuestro país.

En Chile el aborto terapéutico existía desde 1931, con el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo. Medida que fue reforzada en la década del 60, con los anticonceptivos.

El retroceso llegó con la constitución creada por la dictadura cívico militar, "la ley protege la vida del que está por nacer", señala esta, la que para efectos del código sanitario quedó "no podrá ejecutarse ninguna acción cuyo fin sea promover el aborto" y con ello, se cumplió con la idea de Jaime Guzmán (intelectual de la dictadura chilena) quien quería colocar como artículo constitucional: "la madre debe tener el hijo aunque este salga anormal, aunque no lo haya deseado, aunque sea producto de una violación o aunque de tenerla, derive su muerte".

Chile necesita quitarse estas amarras anquilosantes, retrógradas y dañinas que nos han hecho involucionar como sociedad.

Nuestro país necesita volver a evolucionar y remecerse de estos pensamientos nefastos que nos prohíben y dicen: no al aborto; no a la educación gratuita, integral y de calidad; no a la protección laboral y/o sindicalización; no a las reformas tributarias que implican mayor cobro de impuesto a los que más ganan, etc.

Lástima que estos personajes se apoyan con otros "pseudo paladines de la moral y las buenas costumbres del país". Ambos dañan, dicen estas barbaridades, nos prohíben y entre sí, se cuidan las espaldas. Los primeros absuelven sus pecados por lo general de carácter pecunario o avaricia; arribismo, pedantería u odio al prójimo con "curitas de alcurnia iguales a ellos" como los arzobispos y cardenales Francisco Errázuriz o Ricardo Ezzatti, cuando les perdonan sus faltas a cuenta de mantenerlos económicamente. Hacer oídos sordos cuando practican su sodomía o inclusive pasarle algunos de sus hijos como en el caso  Karadima, el "santito del Bosque" que violaba a jóvenes. (Ambos arzobispos cuestionados justamente en el caso de la prevención de abusos sexuales de la iglesia con la filtración de sus deplorables correos anti-cristianos).

Al menos yo, no quiero eso para el país, ni trabajo en promover la defensa de estos desgraciados pensamientos e ideologías.

En estos días previos a las fiestas patrias de nuestra nación y ante estos antivalores de una derecha y sus congresistas, la bajeza de la iglesia y el nuevo terremoto de grado 8.4, ocurrido ayer, en el norte del país, prefiero terminar recordando a mi amigo y poeta Héctor Flores y su bella declamación del poema Viva Chile mierda del escritor santiaguino Fernando Alegría, y alentar a los damnificados por el nuevo sismo y tsunami con ese grito de fuerza y aliento y decir: "Viva un Chile distinto, mierda!!!

Felices fiestas patrias a todos los chilenos, en especial a Illapel, el norte chico y las zonas costeras afectadas.

Septiembre 2015

 

 

Nota relacionada de actualidad - enlace externo:

Dramático testimonio de joven que ruega por aborto terapéutico para salvar a su pareja, ya que el feto es inviable

 

 

 

Otras columnas del mismo autor:

 

La xenofobia en Chile

Ébola, una nube de dudas

El horror de Ingrid Olderock, y la estupidez del atentado al metro en Santiago

Se aprueba proyecto de reforma educacional

Las malas prácticas de EE.UU. y el vergonzoso liderazgo de Barack Obama

Crimen de lesa humanidad contra la Franja de Gaza

Una gran señal del sector político chileno

El mundo al revés - Brasil pierde vergonzosamente ante Alemania

Chile v/s Brasil y nuestra historia

Chile pierde ante la inteligencia de Holanda

Copa Mundial - Brasil 2014

21 de mayo, primera cuenta pública en Chile

1 de mayo de 2014 – Día Internacional de los Trabajadores

Encuentro literario junto al río y la montaña

La abstención en las Presidenciales chilenas

Cuando se nos va un grande

Por un mundo sin fronteras

Un pueblo que despierta

 

 


 
 
 
Copyright 2014 © Magazín Latino

All rights reserved.